Los contribuyentes de la ciudad de Nueva York se enfrentan a posibles aumentos de impuestos incluso cuando la ciudad reduce sus servicios debido a la "crisis migratoria".
Los legisladores del estado de Nueva York — los mejor pagados del país — están pidiendo un aumento de impuestos para hacer frente a oleadas masivas de inmigrantes ilegales a la ciudad de Nueva York. Los inmigrantes llegan a un ritmo de 10.000 por mes, según el alcalde Eric Adams.
“Deberíamos aumentar los impuestos porque es una política económicamente justa compensar todos los costos del funcionamiento de nuestro estado”, dijo la senadora estatal Julia Salazar (demócrata por Brooklyn), una autodenominada socialista. “Yo diría que incluso si nuestra ciudad y estado no hubieran visto un aumento en el número de inmigrantes que buscan asilo, este momento hace que sea aún más importante que los ricos paguen su parte justa de impuestos”.
Adams, quien anteriormente se jactó de que la ciudad de Nueva York es una “ciudad refugio” para los inmigrantes ilegales, advirtió este mes que los inmigrantes ilegales van a “destruir la ciudad de Nueva York”. El alcalde dijo a las agencias que se prepararan para recortes presupuestarios del 15% — comenzando con un recorte del 5% en noviembre — y advirtió además que los contribuyentes de bajos ingresos soportarán el costo de la crisis.
“Ese dinero va a venir de alguna parte. . . Si no recibimos ayuda del gobierno federal y ayuda adicional del gobierno estatal, entonces esto vendrá de alguna parte", dijo Adams en PoliticsNation de MSNBC, refiriéndose a los miles de millones de dólares que se utilizan para albergar a los extranjeros ilegales. "Y va a perjudicar a los neoyorquinos de bajos ingresos".
La asambleísta de Queens, Jessica González-Rojas, otra legisladora socialista, ofreció el mes pasado albergar todos los refugios para inmigrantes en su distrito, pero aún no ha dado seguimiento a esa oferta, reporta New York Post. En cambio, su jefe de gabinete, Brian Romero, amplificó el llamado a un aumento de impuestos.
“Un recordatorio: esta es una elección. Estamos reduciendo servicios para los neoyorquinos cuando podríamos #TaxTheRich [imponer impuestos a los ricos]. No culpen a los migrantes por la falta de liderazgo”, dijo Romero.
Sin embargo, tener en la mira a los ricos no ha demostrado ser una estrategia exitosa. Nueva York ha perdido alrededor de 400.000 personas desde que comenzó la pandemia, un éxodo que se atribuye en parte a la elevada carga fiscal. Estos “refugiados fiscales” también incluyen un número asombroso de personas con altos ingresos. Solo en 2020, el número de personas que ganaban más de $750.000 al año cayó un 10%. Esto afectó significativamente los ingresos fiscales del estado, ya que los 41.000 contribuyentes del 1% pagan más del 40% del impuesto sobre la renta del estado, según Fox News.
Según el servicio de rentas internas estadounidense, alrededor de 300.000 de los residentes más ricos de la ciudad de Nueva York que abandonaron la ciudad en 2020 ganaron colectivamente $21.000 millones en ingresos totales en 2021. Las cifras del servicio de rentas internas también mostraron que el estado perdió $19.500 millones entre 2019 y 2020 debido a su emigración.
En 2021 se aumentaron una serie de impuestos que ayudaron a financiar fuertes aumentos salariales para los legisladores estatales. En diciembre, los legisladores de Nueva York se otorgaron un aumento salarial anual del 29%, de $110.000 a $142.000. El aumento convirtió a los legisladores del estado de Nueva York en los mejor pagados del país, superando a sus homólogos de California con $119.000.
"Es un trabajo de tiempo completo", dijo la líder de la mayoría demócrata en el Senado, Andrea Stewart-Cousins. "Tarde o temprano, para poder permitirnos hacer el trabajo, tendremos que aumentar el salario".